-Sangre en las calles de Awitas;
-Parodia de Pamplonada;
-La inocencia de la cachorra Mandy;
-El cuerpo de Mandy: desaparecido;
-Pésima organización ¿Quién se hará responsable?
Agua teñida de rojo, teñida de sangre, es lo que tenemos hoy y ¡Ni ganas! De hervirla.
¿Necesitamos más muerte y más sangre, en las calles de Aguascalientes? No basta, con los casi 300 ejecutados en esta administración, quieren más ¡Mucho más! Y lo lograron. El pasado sábado 30 de agosto del año, la secretaría de turismo de gobierno estatal, llevó a cabo un evento llamado “Encierro San Marqueño”; para ello bloquearon la vía libre pública a que tenemos derecho constitucionalmente, rompieron la piedra del paseo peatonal “Paseo de la Feria” para enterrar unos cincuenta postes de madera, soltaron toros de lidia a plena luz del sol de mediodía y alteraron la paz, que, fuera de la verbena anual, se goza en esa zona peatonal y familiar.
Una perrita cachorra de nombre Mandy, una cruza de pastor, color blanco, de sólo 2 añitos de edad, inexplicablemente se metió al paso de un toro; fue fatalmente cornada en tórax y abdomen y murió al instante. Su cuerpo, ahora teñido de rojo sangre, fue desaparecido al más puro estilo gangsteril, para que no se pudiera poner la denuncia correspondiente contra la organizadora: secretaría de turismo de gobierno estatal.
En su parodia de Pamplonada, también fueron golpeados por toros dos docenas de jóvenes y tres más fueron heridos, uno de ellos de gravedad.
¿Quién responderá por la falta de una organización segura y controlada de la charada? ¿Quién concedió el permiso para violar reglamentos y leyes que tutelan el libre tránsito y la seguridad de quienes habitamos las calles, incluidos nuestros animales de compañía? ¿Necesitamos más sangre, más heridos y más muerte en nuestras calles? ¿Es la sangre un atractivo turístico? Son preguntas que hoy formulamos desde esta redacción, domiciliada en San Marcos, el barrio que gobierno estatal, vino a mancillar.