Aguascalientes, AGS; En un contexto internacional marcado por la tensión y los conflictos armados, el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, hizo un llamado urgente a los fieles a elevar oraciones por la paz mundial, advirtiendo sobre el peligro creciente de una tercera guerra mundial si no se detienen las hostilidades entre naciones.
Durante la jornada nacional de oración por la paz, monseñor Espinoza expresó su preocupación por el rumbo que están tomando las relaciones internacionales, especialmente por las tensiones entre países como Irán, Israel, Ucrania y Rusia. En su mensaje, subrayó que el mundo enfrenta una lucha de poderes que podría desembocar en consecuencias catastróficas para toda la humanidad.
“La paz comienza en el corazón del hombre, y cuando sacamos a Dios del corazón, surgen los conflictos”, manifestó el obispo, quien también retomó el mensaje del papa León XIII, convocando a rezar el rosario por la paz en todos los hogares. Espinoza Jiménez insistió en que la familia es el primer espacio donde se debe fomentar la armonía, la reconciliación y la solidaridad.
Además de su mensaje sobre la paz internacional, el obispo también abordó la situación de violencia en México, señalando que el crimen organizado ha ganado terreno en varias regiones del país. Frente a este panorama, exhortó a los ciudadanos a convertirse en promotores de paz desde sus espacios cotidianos, cultivando la honestidad, la empatía y el respeto.
“La oración es fundamental, pero también debemos actuar desde nuestro entorno. La ambición, el engaño, la impunidad y la indiferencia son semillas de violencia que debemos arrancar desde nuestras comunidades”, agregó.
Espinoza Jiménez también cuestionó el papel de los gobiernos que invierten enormes recursos en armamento y guerra, mientras millones de personas en el mundo viven en condiciones de pobreza y marginación. “Es una lucha por demostrar quién es más fuerte, una competencia por el poder, cuando esos recursos podrían servir para el desarrollo educativo, el acceso a la salud y el bienestar de los más pobres”, criticó.
Finalmente, el obispo reiteró su invitación a todas las personas de buena voluntad a unirse en oración y acción concreta por la paz, destacando que solo a través de la unidad espiritual y social será posible construir un futuro más justo y humano.