Aguascalientes, AGS; En rueda de prensa conjunta, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (CONCANACO SERVYTUR) y la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA) presentaron una propuesta de transición gradual y sectorizada para la reducción de la jornada laboral en México, en línea con el llamado del Gobierno Federal a una reforma laboral más humana y sostenible.
Ambos organismos coincidieron en que un cambio sin considerar la realidad operativa de las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs), podría poner en riesgo la competitividad, la estabilidad de los negocios y el empleo de millones de familias mexicanas.
Señalaron que la reducción de la jornada es un avance deseable, pero su implementación debe hacerse con sentido común: gradualidad con responsabilidad, productividad con inclusión.
De acuerdo con los datos de la Encuesta Jornada Laboral 2025, aplicada entre sus afiliados, los resultados reflejan una alta preocupación del sector productivo:
• 64% de las personas dueñas de negocios considera inviable una reducción inmediata de 48 a 40 horas sin afectar su operación.
• 71.4% estima que habría un aumento significativo en los costos operativos, aun con una aplicación escalonada.
• 58.85% anticipa dificultades para cubrir turnos o mantener el mismo nivel de atención al cliente.
• Las principales inquietudes incluyen el alza en los costos laborales, afectaciones al servicio y una posible pérdida de empleos.
CONCANACO y CANACINTRA subrayaron que no todas las actividades pueden asumir el mismo modelo laboral, pues comentaron que no es lo mismo una planta industrial con turnos rotativos, que un restaurante familiar, una tienda de barrio o un pequeño hotel con atención permanente al público.
En el caso específico de Aguascalientes, Erika Muñoz, presidenta de CANACINTRA en la entidad, advirtió que el 75% de las empresas en el estado no podrán soportar una reducción de la jornada laboral en sus condiciones actuales. Esto, dijo, afectaría directamente a la productividad, al empleo y al equilibrio de negocios familiares que ya operan al límite de sus capacidades.
Para una transición viable, ambas organizaciones propusieron tres ejes clave:
1. Gradualidad sectorial hasta 2030, con criterios diferenciados por tamaño de empresa, ubicación geográfica y sector económico.
2. Incentivos a la formalidad, dado que el 57% de la economía laboral en México aún se mantiene en la informalidad, una condición que, según la OIT, está directamente vinculada a la pobreza.
3. Creación de un Observatorio de Transición Laboral, con participación tripartita (gobierno, empresas y trabajadores) para monitorear y ajustar la implementación de la reforma en tiempo real.
Ambas organizaciones reiteraron su disposición a colaborar con el Congreso y el Ejecutivo para construir una reforma laboral responsable y viable, “una que no frene el cambio, sino que lo haga funcionar”.
Actualmente, CONCANACO SERVYTUR agrupa a más de 5.2 millones de negocios, genera 65 de cada 100 empleos formales y aporta más del 60% del PIB nacional desde el sector terciario. Por su parte, CANACINTRA representa a 30 mil industriales y el 29% del empleo formal en la industria manufacturera.
