A ambas medidas se ha referido el ministro de Transformación Digital y para la Función Pública, Óscar López, en la inauguración de una jornada celebrada en el Congreso sobre el fraude emocional, también denominado estafa amorosa, impulsada por la asociación Anceme dedicada a atender a víctimas de este tipo de fraudes que no solo suponen un perjuicio económico sino, en la mayoría de los casos, lesiones psicológicas.López ha recordado la orden aprobada por el Gobierno a mediados de febrero que prohíbe a empresas y entidades públicas, en el plazo de tres meses, hacer llamadas comerciales a través de móviles, y que incluye medidas para evitar las estafas de suplantación de identidad mediante telefonía o mensajería móvil (SMS).Un plan con medidas «ambiciosas»En palabras del ministro, un plan con medidas «ambiciosas» que empieza a dar «resultados espectaculares», pues desde marzo han bloqueado ya más de 14 millones de llamadas con intenciones fraudulentas, es decir, cada día, se han evitado más de 235. 000 llamadas y más de 10.000 SMS fraudulentos.A esta medida se sumará el próximo 7 de junio la obligación de que todas las empresas que quieren hacer una llamada comercial lo tengan desde un teléfono con prefijo de provincia, o bien con numeración 800 y 900.Además, López ha apuntado que en 2026 se creará una base de datos oficial con los códigos alfanuméricos que utilizan las empresas y las Administraciones Públicas como identificadores en los SMS, de forma que se evitarán los mensajes que suplantan a organismos como Tráfico o Correos.
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