El Presidente Donald Trump tiene opciones legales limitadas para imponer aranceles globales radicales tras el fallo judicial de ayer que invalidó sus funciones durante el "día de la liberación", según expertos legales internacionales consultados por el diario británico Financial Times (FT).
El diario indicó que la sentencia del Tribunal de Comercio Internacional de EU determinó que Trump hizo un uso indebido de la legislación sobre poderes económicos de emergencia al declarar los aranceles generales, diseñados para reducir los déficits comerciales con países de todo el mundo.
Los expertos legales afirmaron que el tribunal determinó que la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA, por sus siglas en inglés) no fue diseñada explícitamente para abordar problemas de balanza de pagos.
Si el fallo se mantiene, Trump tendrá que recurrir a vías legales alternativas.
Lorand Bartels, profesor de derecho mercantil internacional en la Universidad de Cambridge, afirmó que el fallo había establecido un sólido argumento histórico de que la IEEPA no podía utilizarse para abordar problemas de balanza comercial.
En cambio, el tribunal señaló otra legislación -la sección 122 de la Ley de Comercio de 1974- que fue diseñada para permitir al presidente imponer aranceles temporales para abordar "grandes y graves déficits de la balanza de pagos de Estados Unidos".
"El fallo es muy claro: la vía para abordar los problemas de balanza comercial es la sección 122, pero el desafío para Trump radica en que esas facultades son limitadas. Por lo tanto, legalmente hablando, su mejor opción sería modificar la ley para eliminar las limitaciones de la sección 122", declaró Bartels.
El diario destacó que el fallo del tribunal no invalidó los aranceles de la sección 232 al acero, aluminio y la industria automotriz, y que tanto Trump como Biden han utilizado para proteger sectores por motivos de seguridad nacional.
La administración Trump investiga otros sectores, como el farmacéutico y el aeroespacial. Estas podrían dar lugar a aranceles adicionales, con un límite base del 10%.
Otras vías podrían incluir la sección 338 de la Ley Arancelaria de 1930, según Mona Paulsen, profesora adjunta de derecho económico internacional en la London School of Economics.
La ley, que nunca se ha aplicado, faculta al presidente para imponer aranceles si las empresas estadounidenses sufren discriminación injusta -definida como "cualquier cargo, exacción, regulación o limitación irrazonable"- por parte de una potencia extranjera.
Los aranceles tienen un límite del 50%.
"Para mí y para otros analistas del derecho comercial, cuando Trump impuso aranceles del 50 % a la UE, nos preguntamos si se estaba ateniendo a los límites del artículo 338", declaró Paulsen.
Una tercera opción es hacer un mayor uso del artículo 301 de la Ley de Comercio de 1974, que se solapa con el artículo 338. Esto permite al Representante Comercial de EU imponer aranceles a países que violan los acuerdos comerciales internacionales existentes de forma "discriminatoria".
Esto ya fue utilizado por Trump en 2018 para imponer aranceles a las importaciones chinas con el argumento de que China estaba utilizando transferencias forzadas de tecnología y otras violaciones de las normas de propiedad intelectual.