El fallo de la Corte Internacional de Comercio de Estados Unidos que ordena el bloqueo de los aranceles del Presidente Donald Trump invocando situaciones de emergencia podría impactar las negociaciones que la Casa Blanca mantiene con decenas de países para obtener ventajas comerciales.
En un fallo unánime, los 3 jueces que integran la corte consideraron que Trump se había extralimitado al invocar la Ley de Poderes Económicos de Emergencia de 1977 (IEPPA, en inglés) para imponer aranceles para lidiar ya sea con emergencias por el tráfico de fentanilo desde México o con emergencias económicas.
Desde abril, la Casa Blanca de Trump ha asegurado estar llevando a cabo diversas negociaciones usando los aranceles colocados a las importaciones -incluyendo 25 por ciento contra los productos mexicanos- como una forma de presión para obtener beneficios comerciales para EU e incluso en otras áreas.
Aunque la Administración Trump ya notificó a la corte de que apelarían, observadores del comercio internacional aseguraron que el fallo debería hacer pensar dos veces la forma en que los países han encarado la negociación de Trump, ante el rol de contención que demostró el Poder Judicial.
"Si usted es un Gobierno extranjero que está negociando con la Administración Trump sobre los aranceles impuestos por la IEEPA... tal vez sea momento de recalibrar su posición negociadora", dijo del fallo Simon Lester, investigador no residente del Baker Institute de la Universidad de Rice en la red social X.
El propio Representante Comercial de EU, Jamieson Greer, había advertido que una suspensión permanente de los aranceles -como está establecido en la decisión- pudiera ser desastroso para la negociación diplomática de la Administración Trump pues otros países cambiarían sus posiciones.
De acuerdo con el fallo, Trump tendría que suspender los aranceles en un máximo de 10 días pero, el mismo miércoles, el Departamento de Justicia notificó que apelarían la decisión ante una Corte de Apelaciones en lo que podría ser un caso que pudiera decidirse hasta luego de un litigio ante la Suprema Corte.
Los aranceles contra el acero, aluminio y autos siguen vigentes pues tienen otra justificación legal.
Liderado por dos Estados como Arizona y Oregon para los cuáles el comercio internacional es parte clave de su economía, el grupo de 12 Estados gobernados por el Partido Demócrata que presentaron la demanda contra los aranceles de Trump festejaron la victoria subrayando la extralimitación del Mandatario.
"Presentamos este caso porque la Constitución no otorga a ningún Presidente autoridad ilimitada para trastornar la economía. Este fallo reafirma que nuestras leyes importan y que las decisiones comerciales no pueden tomarse a capricho del Presidente", dijo Dan Rayfield, el Procurador General de Oregon.
Por separado, los representantes legales de las pequeñas empresas, que presentaron una demanda por separado contra los aranceles, subrayaron que la Corte Internacional de Comercio rechazó el argumento de que el Presidente tiene autoridad total para definir lo que es una emergencia nacional.
"La corte también rechazó la afirmación del Gobierno de que el Presidente tiene una autoridad para determinar si existe una 'emergencia nacional' y una 'amenaza inusual y extraordinaria' que justifique la invocación de la Ley IEEPA", dijo el profesor de derecho Ilya Somin que representó a las empresas.
En su fallo de ayer, la Corte Internacional de Comercio sugiere a la Administración Trump el utilizar una Ley diferente como la Sección 122 de la Ley de Comercio de 1974 si necesita imponer aranceles, pero que tendrían como tope un 15 por ciento y 150 días sin notificar al Congreso.
El corazón del argumento de la parte acusadora contra Trump está anclado en el principio constitucional que el Congreso es el encargado de imponer cualquier tipo de nuevo impuesto a la población, por lo que un potencial arancel bajo otros instrumentos no podría extenderse como el Mandatario hace ahora.