Aunque el impuesto a las remesas familiares propuesto por la Cámara de Representantes de Estados Unidos tendría efectos limitados, el costo de los envíos de dinero casi se cuadruplicaría, de acuerdo cálculos de analistas de BBVA Research.
En un documento, firmado por los especialistas de BBVA Research Juan José Li Ng y Carlos Serrano, se señala que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco, 2025) estimó que, durante las primeras semanas de mayo, el costo promedio por enviar 350 dólares de EU a México fue de casi 6 dólares.
La imposición de un impuesto del 5 por ciento sobre el monto enviado incrementaría ese costo en 17.50 dólares, lo que elevaría el gasto total a 23.50 dólares por envío, lo que representa casi cuatro veces el costo actual del envío de remesas, estima BBVA Research.
Un aumento tan relevante en el costo de envío, como el que implicaría un impuesto del 5 por ciento, podría generar distorsiones artificiales en el mercado y llevar a que las personas migrantes busquen mecanismos alternativos para hacer llegar el dinero a sus países de origen.
En el estudio se identifican tres posibles categorías de alternativas que las personas remitentes podrían utilizar para evitar el pago de este impuesto.
Una de ellas es que muchos migrantes no documentados podrían recurrir al apoyo de familiares y amistades con ciudadanía o residencia en Estados Unidos para canalizar los envíos en su nombre.
Otra categoría es que otros migrantes y sus familias en México podrían optar por bancarizarse, lo que les permitiría recibir estos recursos a través de transferencias interbancarias, las cuales no estarían sujetas al impuesto.
También, expone, es posible que se surjan y se desarrollen múltiples canales informales para el envío y recepción de estos recursos y remesas.