Los científicos del rover Perseverance de la NASA están explorando lo que consideran una verdadera cornucopia marciana llena de intrigantes afloramientos rocosos en el borde del cráter Jezero. El estudio de rocas, cantos rodados y afloramientos ayuda a los científicos a comprender la historia, la evolución y el potencial de habitabilidad pasada o presente del planeta. Desde enero, el rover ha perforado cinco rocas en el borde, sellando muestras de tres de ellas en tubos de muestra. También ha realizado análisis de cerca de siete rocas y analizado otras 83 desde lejos mediante el zapping de ellas con un láser. Este es el ritmo más rápido de recolección científica de la misión desde que el rover aterrizó en el Planeta Rojo hace más de cuatro años.
Perseverance escaló la pared occidental del cráter Jezero durante 3 meses y medio, alcanzando el borde el 12 de diciembre de 2024, y actualmente está explorando una pendiente de aproximadamente 445 pies de altura (135 metros de altura) que el equipo científico llama "Colina del Hamamelis". La diversidad de rocas que han encontrado allí ha superado sus expectativas.
"Durante campañas científicas anteriores en Jezero, podía llevar varios meses encontrar una roca que fuera significativamente diferente de la última roca que muestreamos y lo suficientemente única científicamente para el muestreo", dijo la científica del proyecto Perseverance, Katie Stack Morgan, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el sur de California. "Pero aquí arriba, en el borde del cráter, hay rocas nuevas e intrigantes dondequiera que gire el rover. Ha sido todo lo que esperábamos y más".
Esto se debe a que el borde occidental del cráter Jezero contiene toneladas de rocas fragmentadas que alguna vez se fundieron y que fueron arrancadas de su hogar subterráneo hace miles de millones de años por uno o más impactos de meteoritos, incluido posiblemente el que produjo el cráter Jezero. Perseverance está encontrando estas rocas anteriormente subterráneas yuxtapuestas con rocas estratificadas bien conservadas que "nacieron" hace miles de millones de años en lo que se convertiría en el borde del cráter. Y a poca distancia en coche hay una roca que muestra signos de que fue modificada por el agua, acurrucada junto a otra que vio poca agua en su pasado.