Tras entrar en vigor ayer la ley que prohíbe la venta de comida procesada en las escuelas públicas y privadas de educación básica, quienes sigan vendiendo alimentos "chatarra" enfrentarían multas o incluso la clausura temporal o definitiva del establecimiento.
Como parte del programa "Vida Saludable", impulsado por el Gobierno federal, al interior de los planteles no podrán ofrecerse productos preenvasados ni aquellos que presenten sellos o leyendas precautorias en sus etiquetas; tampoco alimentos y bebidas con altos niveles de azúcar, harinas refinadas, grasas o sodio.
Judith de la Torre, directora del Programa para el Cuidado y Desarrollo Integral en la Secretaría de Educación Jalisco, explicó que será obligación de los directivos de cada plantel dar aviso a las autoridades sobre incumplimiento de estas disposiciones.
"Queremos dar este acompañamiento en todos nuestros planteles y consideramos que es importante informar (a las cooperativas de posibles faltas), antes de llegar a sanciones", expuso.