La transición al trabajo remoto o híbrido en México provocó que el riesgo de fuga de datos y accesos no autorizados a información sensible aumentará entre 10 y 15 por ciento en las empresas medianas, aseveró Teramind, compañía global de gestión de amenazas internas y prevención de pérdida de datos.
Las principales compañías afectadas son financieras, banca y farmacéuticas, detalló Óscar Lorenzana, country manager de Teramind en México.
"También lo hemos visto en algunas organizaciones enfocadas en la parte de telefonía", señaló en entrevista reciente.
El directivo explicó que la filtración de datos vulnera la seguridad de las empresas y conlleva pérdidas económicas "bastante grandes".
La mayoría de las fugas de información relevante ocurren porque los empleados utilizan de manera "no objetiva" los datos para obtener un beneficio propio mediante fraude o enriquecimiento ilícito a costa de perjudicar a la empresa, explicó Lorenzana.
"Tenemos diferentes casos ya analizados con diferentes tipos de empresas como bancos, financieras, de repente farmacéuticas y el riesgo a nivel de las personas que lo están haciendo puede llegar o rondar en 7 por ciento del total de la plantilla completa de las empresas midmarket.
"Un banco con el que trabajamos tuvo un tema de fraude interno, lo cual le hizo perder aproximadamente 500 mil dólares", expuso.
En otras ocasiones, la fuga de datos atiende a falta de conocimiento entre los empleados sobre los lineamientos para compartirlos.
Un reciente estudio de Kaspersky reveló que, en México, 28 por ciento de las empresas ha sufrido fuga de datos confidenciales tras una brecha de ciberseguridad en los últimos dos años.